Wednesday, October 31, 2007

Magma Fields For Ever (o una visita a Kobaiä para iniciados)


Parte I
Ataahk
Estoy de acuerdo, definitivamente la música de Magma no necesita NINGUNA vindicación para todo aquel que tenga mínimamente oídos, una vez oída la Zeuhl Muzik,- tal es el nombre de su increíble estilo-, o bien la amas o la odias, pero su calidad te será innegable. Como decíamos ayer –me gusta esta expresión unamuniana- burlarse o despreciar es fácil, es mejor entender, sobre todo si te has documentado algo para opinar. Digámoslo de una vez, para entender el discurso musical del francés por adopción y kobaiano de nacimiento Christian Vander, el auditor NECESITA tener un acercamiento previo a otras tradiciones musicales, una vez entendidas como éstas se integran en la original sonoridad del Zeuhl, entonces, lo aseguro, ya no le será sencillo a los duros del rock descalificarlo. La verdad sea dicha, he escuchado diatribas contra Magma en todas partes y de todos los tipos, de acuerdo, no es tu fácil y cómodo metal sinfónico a la Rush y su manga de clones, ni tu eternamente sufriente Pink Floyd, no, viejito, es música de verdad.


Announcement

Sólo te pido unos minutos, exasperado lector, dado que me he topado con tus “íconos” musicales (estoy super preocupado) para reseñar en qué consiste la mágica música de Magma. Christian Vander, notable, inspirado y sensible músico, estudió formalmente piano y canto, tuvo lecciones de trompeta nada menos con Chet Baker y su instrumento base, quizás el eje maestro de su sonido, la batería, lo aprendió a perfeccionar nada menos que con Elvin Jones, (sí, el mismo señores connoseurs de jazz que tan poco saben del mismo), que tocara los parches junto a John Coltrane, padre espiritual de Vander. Para aquellos que recién se incorporan a nuestras transmisiones digamos que Coltrane, ese magistral saxofonista, había pasado del cool jazz inflamado de cocaína de Miles Davis a una profunda búsqueda espiritual, que se refrendará en esas espléndidas visiones sonoras que son A love supreme, Stellar Regions, Meditations, etc. (Se dice que esta conversión del autor de Olé vino cuando vio en vivo a Sun Ra y a su sideman John GIlmore, el que tenga oídos para oír que oiga…), ¡cuántos músicos verdaderos no han descubierto el sublime vínculo de las vibraciones y lo trascendente!

Kobaiä Iss de Hundihn

Esa trascendencia, ese compromiso íntegro, ese amor devoto por la música marcarán a Vander de por vida. Decía un poeta que todos dialogamos con una vasta hermandad en nuestras cabezas. En la mente infatigable de Vander parlamentarán sus ancestros centroeuropeos, su admiración por las músicas de esos países, además de la presencia áulica de Wagner, Orff y el Stravinsky de Les Noces, que se coligarán a la fuerte influencia del jazz modal de Coltrane. Ello se reflejará en el trabajo rítmico, armónico y vocal, tan importante, de Magma, la banda que Vander crea tras la muerte de Coltrane, ( que lo deja devastado). Premunido de profundas ideas sobre el hombre y el cosmos, a los que siente amenazados por el apocalíptico abismo al que nos despeña la cruel ambición finisecular, Vander revestirá a Magma de una compleja línea conceptual. Nace entonces la historia de Kobaiä, planeta al que huyen los sabios de la Tierra tras una futurista autodestrucción, y a la que vuelven luego para intentar redimir, nace Kohntarkosz y su odisea para encontrar a Ehmenteth-Reh el Verdadero Maestro, nacen los Orks y las aventuras de Urgo y Gorgo, etc. Cada disco contará fragmentariamente estas historias, formando un todo, cantada en una lengua propia, el kobaien, la lengua para acabar con todos los problemas semánticos, como la definirá Klaus Blasquiz, ese gran partner de Vander, vocalista extraordinario, imprenscindible en las mejores alineaciones que Magma ha tenido por años (las que, por lo demás, incluye una lista del who is who del jazz francés, porque digámoslo, fue Magma ( con Gong, por cierto)la banda que dio inicio al auténtico rock francés… y europeo, lejos de la enorme –y aplastante- influencia del mainstream angloamericano).

El kobaien, como señala Vander, le viene por canalización cuando compone o improvisa, él no lo ha inventado o gramaticalizado a la manera del esperanto o el volapük , puede comprenderse, como acertadamente se ha señalado, como una variante idiosincrática del scat que usan los músicos de jazz que cantan (yogurt, le dicen los jazzistas franceses) añadido a una fonética semejante a las lenguas centroeuropeas, ello por las vocales, las erres uvulares, el carácter aglutinante de las palabras como en el alemán, etc. Creo que es una lengua que apela más al inconsciente por su fuerza expresiva que a lo racional, como una especie de glosolalia armónica y ordenada. Vander, como puede verse en algunos videos suele entrar en trance mientras canta (¡¡ese falsete estremecedor!!), lo que me parece prueba esta tesis.





Da Zeuhl Wortz Mekanik

La música zehul, como la bautizó Vander es una compleja fusión de jazz sincopado, armonías basadas en escalas pentatónicas y quintas disminuidas y melodías repetitivas y fuertemente rítmicas como las de Orff y las del Stravinsky de Les Noces, com dijimos, modalizadas en ciclos armónicos –rasgo musical muy francés por lo demás- e integradas dentro de complejos entramados de polirritmos y signaturas rítmicas inhabituales (7/8, 4/3 como en el himno glorioso Hhai.) A esto, agrega las tesituras de una batería que tiene un rol incluso armónico muchas veces, la fuerte presencia del bajo, y del omnipresente piano fender rhodes. La potencia, el volumen y energía vienen del rock, pero la guitarra queda relegada a favor de líneas fuertes y protuberantes de bajo y del teclado que viene heredado de Soft Machine, banda más influyente de lo que muchos imaginan.

Entonces tomamos jazz en las bases rítmicas, un bajo rockero en primer plano, monstruoso en las manos de un Jannick Top o un Paganotti, teclados que marcan un punzante ostinatio que reciben las complejas líneas melódicas cantadas por Vander, Blasquiz y numerosas voces femeninas entre las que destaca Stella Vander, terciados por bronces en la primera etapa de Magma, luego por sintetizadores y guitarras eléctricas, sabiamente orquestadas. Diríase que la totalidad de la música de Magma oscila entre una base repetitiva, de trance, líneas melódicas angulares moduladas intercaladas por energéticos solos en los que los virtuosos sidemen de Vander lucen sus habilidades (aunque en una entrevista Blasquiz dijo que más de un solo, como el del violinista Didier Lockwood en el interludio Mekanik Zain, fue escrito por Vander nota por nota) Himnos triunfales, épicas batallas entre la luz y las tinieblas, cantos de adoración al Kreuhn Kohrmann, El Profeta, dulces baladas donde también aparece la influencia de los negro spirituals (otra música de trance, pero domesticada por el cristianismo), etc. Magma ofrece el infinito calidoscopio del asombro, la búsqueda y la unión de la pulsión más dionisíaca con los más diáfanos impulsos espirituales, vean su logotipo, a todas luces memorables, como todos los discos del maestro, Zëbehn Strainn De Gustaah

Quiero comentar algunos discos de Magma que tengo a la vista en este minuto, pero el tiempo se me agota y tu paciencia también lector, por ahora te dejo con un par de videos para vuestro deleite, kobaianos, ah y claro, con algunos links buenos de rigor…

Magma circa 1970



y... un clásico perdido ¡Ptah!



KREUHN KORMAHNN ISS DE HOUNDINN!!!
Continuará

Hipertextografia

Home page de Magma y su label Seventh Records

http://www.seventhrecords.com/

Página de myspace, le lleva radio

http://myspace.com/magmaofficial

Ork Alarm, fanzine imperdible

http://www.simplesoul.co.uk/ork_alarm/index.htm

Otro sitio de fans con imperdibles

http://members.aol.com/sleeplessz/index.htm

Magma, el libro por Antoine De Caunes (sí, el mismo)

http://mydrum.org/url/magma/antoinedecaunes1.htm

Blog chileno sobre esta banda genial

http://defutura.blogspot.com/

Entrevista del sensei Javier Chandía a Christian Vander

http://www.zebehn.com/wordpress/?p=46

Thursday, October 11, 2007

El arma cargada de John Cale II




Previously...en Los Espacios Inquietos...

Sí, volví, pero recojo el guante, me dicen que el blog es muy largo, una bella amiga sugiere, “escribes haaarto”. Mal presagio en la era del condensado y del prepicado. En fin acometolavigorosasíntesis...


A comienzos de los ’70, John Cale produce el disco Marble Index de Nico. La belleza gélida de sus letras, la conmovedora voz de contraalto de Nico, sorda de un oído y a punto de desafinarse a cada segundo, sumado a los exquisitos arreglos de Cale que toca todos los instrumentos, salvo el armonio que Nico usará hasta el final de su carrera, nos llevan a una sensación doble de vértigo y cercanía con lo sublime, aura, como diría Walter Benjamin, como al contemplar esas clásicas y distantes estatuas griegas, que una vez que las miramos no podemos olvidarlas jamás

Para 1973, Cale está de vuelta en Gran Bretaña y graba el que ha sido considerado el mejor largaduración de su carrera, Paris 1919, letras bellas aunque crípticas, que toman como modelos a Dylan Thomas, Graham Greene (hay un tema homónimo en el disco) y la película Sunset Boulevard. Cale ha sugerido que temas de alta política se tratan crípticamente y eso habría originado toda una persecución en su contra (tengo mis dudas, pero en fin...). Aún así creo que en este disco, Cale logra una factura estética de calidad excepcional, The Wire lo incluye entre los 100 mejores discos de la historia ( y del que el mundo no se enteró) Son nueve temas de pop perfecto, sabia y sobriamente arreglados y sus melodías las llevamos en la cabeza por días, como las de Robert Wyatt o el Nick Drake de Pink Moon. Así ocurre con la “sinfonía de bolsillo” que da título al disco, una especie de out take de Pet Sounds a la inglesa, un estribillo de gran belleza -que creo basado en la leyenda del diablo con el tambor de hierro-, un fraseo estrófico elegante acompañado de un notable staccato de cuerdas que cede paso al remanso orquestal de un puente dominado por un solemne corno. La complejidad orquestal también aparece en los juegos rítmicos de A Child Christmas in Wales y la desesperada Plain Wheel of Fortune, aunque la tranquila e irónica Hanky Panky Know How y el inolvidable y sencillo fraseo modulado de Andalucia aportan al Cale baladista e íntimo, quien en Half Past France confesará la contradicción del hombre que está en todas partes y ninguna, a quien finalmente la gente siempre acaba por aburrirlo. No sé por qué me recuerda a alguien...

A mediados de los ’70, sin embargo, la imagen dandy que Cale muestra en Paris 1919 cede paso al desgarrador y torturado rockero de discos como Fear, Slow Dazzle o Helen of Troy, que brillará quizás más que nunca en canciones inolvidables como Choral Moon, I´m not the Loving Kind, Búfalo Ballet, Emily o Close Watch ( se me parte el alma cuando las escucho, ¡¡como tan masoca!!). Pero junto con ello aparece el guitarrista podrido y maldito de Sabotage, la terriblemente autobiográfica Guts, el grito primario y demoníaco de Leaving It Up to You o Mercenaries Ready For War, la ironía sensual de Helen of Troy, Pablo Picasso, Dirty Ass Rock’ n Roll, etc.. Enmascarado como un Jason Vorhees con overol y una guitarra PRS o con un casco de seguridad y megáfono en mano, inventará el shock rock antes que Alice Cooper y el gordito trucho de Ozzy (sí, señora nuestro galés luciferino, que aprendió a tocar el armonio en una iglesita local de Swansea, fue el primero en decapitar un pollo en el escenario) Cale viviría fielmente el prototipo del poeta maldito, el danzarín dionisíaco al borde del abismo, compitiendo en un certamen sin fin de infamia con Lou Reed, supongo, y con sus propios demonios de infancia galesa. Serán casi 15 años de rock demoníaco, visceral, pero de calidad inigualable. Vendrán, era que no, las drogas, el alcohol, la paranoia y las peleas con su banda y su esposa. Pero hacia 1989, Cale, desintoxicado, estará de vuelta con nuevas obras maestras, Words for The Dying con Brian Eno, Fragments of a Rainy Season en 1992, con el maestro solo al piano, conmoviendo y erizando los pelos en el primer disco unplugged de los ’90, el sorprendente Hobo Sapiens de 2003 con el notable Look Horizon, una extensa y celebrada seguidilla de OSTs (American Psycho interalia) y música de cámara, etc etc.

Léase su autobiografía What´s Welsh for Zen, (¡¡con portada de Dave Mc Kean!!) para más detalles, y escúchense sin dilación sus obras. Max Ernst decía que la belleza será convulsiva o no será. Cale eligió, para felicidad nuestra, lo primero.

PD 1: En una lenta tarde de invierno veo a un grupo de niños pequeños saliendo de un jardín infantil. Imagino a John Cale a mi lado, cantando ensimismado Taking my life in your Hands, esta bella canción de sus discos más notables Music for a New Society:


The children are all leaving school today
Mama said, don't worry, I'll be back one day
The blue men in uniform smiled and waved goodbye
She was hiding those tears in her eyes


Roll up the history books, burn the chairs
Set fire to anything, set fire to the air
They're riding to begin and running at the end

'Cause mama said, you take your life in your hands
Taking your life, your life in your hands
But don't take your life in your hands like I did
I don't feel so bad, and always look forward with hope
Forward and hope that the children will always be there

Cancel the day, cancel the night
Cancel the day, cancel the night
'Cause who could be watching when she steals and runs away

Full of hysterical laughter, and say
Mama, mama, I've left school today
I hope I get to see you in that funny school far away
But those gentle men in blue, and those in grey

Say I'll never, never see mama again
'Cause she took those lives in her hands
Yes, she took all those lives in her hands
Yes, she took all those lives in her hands

But let me wonder, what was there left in those hands?


PD 2: Para coleccionistas, connoseurs y curiosos de toda calaña: En la televisión pública de internet que se llama youtube hay un par de videos del reencuentro entre Nico, Cale y Lou Reed en el Barbican, en 1972, hacen covers de viejos temas de la Velvet. Nadie se haga falsas expectativas, es apenas un registro tímido y negligente, sello de la fatal distancia entre dos genios que no pueden soportarse, y entre ambos una mujer que los observa desde ya muy lejos, atrapada en su propio paraíso lisérgico.


Hipertextografía:
(Con voz de presentador televisivo chanta)
Gracias a los milagros de blogger y youtube, con ustedes: John Cale y su célebre relectura de "Heartbreak Hotel":